Mojar la cama
La enuresis infantil es la emisión repetida de orina en la cama o en la ropa, de forma involuntaria o intencionada.
La edad cronológica a partir de la cual se considera problema es de cinco años en el caso de las niñas y de seis en el de los niños.
La mayoría de los niños consigue el control diurno entre los dos y tres años; el nocturno puede tardar bastante más: uno de cada diez no lo logra antes de los seis años de edad.
A partir de esta edad, si el niño sigue mojando la cama, se puede pensar que el niño presenta una dificultad en el control de esfínteres.
En todos los grupos de edad, se ha visto que es más frecuente en los niños que en las niñas, además en los niños tarda más tiempo en curar.
A los 5 años un 15-20% de los niños no controlan la orina durante el sueño. Con la edad, la frecuencia disminuye, aproximadamente a razón de un 10% anual.
A los 8 años unos 7-8% de los niños padecen enuresis. Sobre los 10-11 años un 2-3% de niñas y un 4-5% de niños son enuréticos. Se estima que un 0,5-1% de los adultos sufren este problema.
Causas para seguir sin controlar el pis
Los niños no mojan la cama a propósito.
La enuresis puede tener un sin número de causas que pueden estar relacionadas con un desorden del dormir, con un desarrollo más lento que lo normal del control de la vejiga, o con el resultado de emociones y tensiones que requieren especial atención.
Raramente significa que el niño tiene un problema de los riñones o de la vejiga.
Las causas emocionales son muchas. Cuando un niño pequeño comienza otra vez a orinarse en la cama después de meses o años de no hacerlo, se sospecha que estos síntomas puedan ser causados por nuevos temores o inseguridades.
Esto puede suceder después de que niño presencie algunos cambios en su vida, por ejemplo, el traslado de la familia a un nuevo ambiente, la pérdida de un miembro de la familia o de un ser querido, la llegada de un nuevo bebé en la familia, el cambio de escuela, situaciones de estrés, etc.
La enuresis puede estar relacionada con algún conflicto psicológico y afectivo del niño, con la necesidad del niño de llamar la atención. También se produce por cansancio o estrés emocional.
Otra posible causa puede estar en el ambiente familiar en que vive el niño, en una familia que lo sobreprotege o que ofrece poco cariño a sus hijos.
Hay padres que creen que si el niño no controla el pis porque es perezoso y no presta mayor atención al tema, y así les aplican castigos y los provocan con burlas, lo que hará que el problema perdure más y tarde más en resolverse.
Tratamiento para recuperar el control
No te resignes a que tu hijo se haga pis en la cama.
Orientación y consejo familiar. Psicoterapia infantil. Técnica de Mouwrer.
Los resultados positivos de ésta terapéutica los podemos situar alrededor del 90% de los casos tratados.